El gran cierre de The Emerging 2025 reunió a lo mejor del talento emergente de la moda puertorriqueña en una noche cargada de estilo, creatividad y pasión. Bajo un ambiente festivo en el Parque de las Ciencias de Bayamón, los asistentes disfrutaron de una pasarela que celebró la innovación y el empuje de una nueva generación de diseñadores boricuas.
Encabezados por los reconocidos creadores Herman Nadal y Carlos Alberto, el desfile contó además con la participación de jóvenes promesas como Ian Aponte, Carlos Gandía, Andrieth Martínez, Marjorie Santos, Nahomy Díaz, Ray Aponte y Keniel Díaz, quienes demostraron que el futuro de la moda local se encuentra en buenas manos.
Aunque el programa oficial indicaba actividades desde las 6:00 p.m., el desfile principal dio inicio cerca de las 9:00 p.m., presentando colecciones que exploraron la fusión entre lo urbano y lo juvenil, con un toque de sofisticación que destacó por su originalidad. Las propuestas se caracterizaron por el uso de tonos vibrantes como amarillo, verde oliva, azul, rojo, marrón y vino, reflejando la energía, diversidad y fuerza creativa del talento puertorriqueño.
El evento, realizado bajo la Ley Núm. 155-2024, en su edición titulada “Modaland”, contó con el respaldo de los municipios de San Juan y Bayamón, reafirmando el compromiso de ambas ciudades con el impulso a las industrias creativas y la promoción del arte local.
The Emerging 2025 forma parte de la Semana de la Moda de Puerto Rico, que se celebra hasta el 12 de octubre, y que reúne a diseñadores, modelos, maquillistas y estilistas en una plataforma de exposición que busca abrir puertas a nuevas oportunidades dentro y fuera de la Isla.
El desfile final, además de servir como vitrina para talentos emergentes, representó una celebración del trabajo colaborativo y de la capacidad de los jóvenes creadores de transformar la moda en un lenguaje cultural y artístico que conecta generaciones.
Con este evento, The Emerging 2025 consolidó su posición como uno de los espacios más importantes para el desarrollo del diseño local, dejando claro que la moda puertorriqueña continúa evolucionando con fuerza, identidad y proyección internacional.