Lo que será conocido como el Centro de Arecibo para Educación en STEM, Habilidades Computacionales y Participación Comunitaria de la Fundación Nacional de Ciencias de Estados Unidos (NSF por sus siglas en inglés), marcará el inicio de una nueva etapa al transformar el histórico Observatorio de Arecibo en un centro dinámico de ciencia, tecnología e innovación comunitaria a través del proyecto denominado Arecibo C3 o AC3.
Este esfuerzo es liderado por la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, la Universidad de Maryland, condado de Baltimore (UMBC) y el Cold Spring Harbor Laboratory (CSHL)en Nueva York. El AC3 se propone fortalecer el ecosistema STEM de Puerto Rico mediante programas que combinan educación, desarrollo de fuerza laboral y alianzas comunitarias. Durante el verano de 2024, AC3 lanzó su fase piloto, introduciendo múltiples proyectos e iniciativas de participación para recopilar retroalimentación de la comunidad y co-diseñar oportunidades de aprendizaje en STEM en dicho lugar.
“AC3 anuncia su apertura parcial en enero cuando comenzará a ofrecer boletos para sus eventos semanales, incluyendo recorridos históricos que resaltan el legado científico de Arecibo y exploraciones de la biodiversidad de la región. Los visitantes podrán disfrutar de experiencias prácticas en biología, computación, astronomía y más. También podrán disfrutar de un anticipo de la exhibición Señales cuya apertura está prevista para principios de 2026. La misma conectará el pasado del Observatorio con la nueva generación de científicos que dan forma al futuro de la ciencia en Puerto Rico”, expresó Jason Williams, subdirector del Centro de Aprendizaje DNA perteneciente al Cold Spring Harbor Laboratory y líder del proyecto AC3.
En los pasados meses, cientos de estudiantes, maestros e investigadores han colaborado con los científicos de AC3 a través de proyectos escolares, recorridos guiados en biología molecular y genética, y talleres de verano. De igual forma, los programas de computación han ayudado a estudiantes graduados a desarrollar destrezas de investigación avanzada y a personas adultas a adquirir habilidades digitales para el emprendimiento y la vida cotidiana.
“Este centro convierte a Puerto Rico en un eje regional de innovación en STEM a través de tres pilares fundamentales: investigación educativa con impacto global, desarrollo de fuerza laboral para una economía basada en STEM y alianzas que abordan los retos de las comunidades. Queremos que el conocimiento científico beneficie directamente a Puerto Rico”, destacó José Agosto Rivera, profesor asociado de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, e investigador principal del proyecto AC3.
Durante el último año y como parte de su fase piloto, más de una docena de actividades piloto han combinado investigación educativa y tecnología STEM para expandir el aprendizaje en escuelas, universidades y comunidades. Los programas han incluido investigación temprana en educación STEM mediante métodos multisensoriales, capacitación en biología molecular y genómica para educadores, talleres de destrezas digitales para padres, cursos de computación con un enfoque humano para estudiantes y facultad, y experiencias de investigación interdisciplinaria dirigidas a resolver problemas reales en la sociedad puertorriqueña.
“Con el rápido crecimiento de la inteligencia artificial, resulta más importante aún la integración del pensamiento computacional en todos los niveles educativos. Estamos involucrando a participantes no tradicionales para crear ecosistemas de aprendizaje en computación comunitaria mediante diseño participativo”, añadió Patricia Ordóñez, profesora asociada en la Universidad de Maryland, condado de Baltimore (UMBC) e investigadora principal de dicha institución.
Además de ofrecer oportunidades de capacitación en múltiples campos STEM, el AC3 permite que los estudiantes de la isla participen en experiencias prácticas utilizando equipos de laboratorio profesional. “A través de estas experiencias, los participantes desarrollan confianza y destrezas en biología, tecnología, computación y más”, añadió Yasmin Santiago, directora de Programación y Operaciones de AC3.
El AC3 tiene como meta fortalecer el vibrante ecosistema STEM y la fuerza laboral de Puerto Rico, creando nuevas rutas para que personas de todas las edades utilicen la ciencia y la tecnología para enfrentar los retos de sus respectivas comunidades.