Por primera vez desde que comenzó operaciones, la sala de autopsias del Instituto de Ciencias Forenses (ICF) fue renovada y acondicionada, lo que permitirá que los patólogos y personal técnico ejecute su trabajo con un equipo moderno, tecnológico y seguro, anunció este martes la directora de la agencia, doctora María Conte Miller.
“Cuando volví a asumir la administración del Instituto, me comprometí con mi equipo a desarrollar nuevas estrategias de trabajo y a modernizar los equipos y herramientas, así como los espacios de trabajo. La sala de autopsias es un lugar primario para la labor técnica y científica que hacemos. Finalmente, y luego de casi 12 meses, ya está en operaciones la nueva sala de autopsias, y con la última tecnología”, explicó Conte Miller.
La modernización de la sala fue posible gracias a una asignación estatal de cuatro millones de dólares, e incluye la entrada de nuevas herramientas y equipo; camillas, neveras, estaciones de trabajo, utensilios y 12 mesas de autopsias con un sistema de desinfección e higiene integrado.
También poseen un filtro que absorbe el olor y los contaminantes que puede emanar del cadáver. “Todo en la sala es nuevo. Con estas obras, cumplimos con las medidas de seguridad que son tan necesarias en el ICF”, agregó.
Sobre ese particular, dijo que ahora los anaqueles para ubicar los cuerpos son ergonómicos, lo que significa que los empleados no necesitan hacer fuerza para colocarlos. Además, la sala cuenta con un cuarto con presión negativa que se utilizará para los casos infecciosos, así como un puente de luz ultravioleta que, una vez los cuerpos lleguen al ICF, pasarán por ese equipo que los desinfectará sin afectar la evidencia que puedan tener.