El secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Xavier Becerra, declaró hoy una emergencia de salud pública para Puerto Rico, debido al impacto del huracán Fiona.
La declaración sigue a la declaración de catástrofe del presidente Biden y da a los beneficiarios de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS) y a sus proveedores de atención médica una mayor flexibilidad para satisfacer las necesidades sanitarias de emergencia.
“Haremos todo lo posible para ayudar a los funcionarios de Puerto Rico a responder a los impactos del huracán Fiona. Estamos trabajando estrechamente con las autoridades de salud del territorio y nuestros socios federales y estamos listos para proporcionar apoyo médico y de salud pública adicional”, afirmó Becerra.
El HHS ha desplegado en Puerto Rico un equipo de trabajo sanitario y médico de 15 personas de su Sistema Médico Nacional de Desastres y un equipo de gestión de incidentes de 10 personas.
Estos equipos -ambos parte de la Administración para la Preparación y Respuesta Estratégica (ASPR, siglas en inglés)- están trabajando con las autoridades sanitarias y los funcionarios de respuesta a emergencias de Puerto Rico, los Coordinadores Regionales de Emergencias de la ASPR y de FEMA para determinar qué recursos federales médicos y de salud pública adicionales, si los hay, pueden utilizarse para ayudar al territorio para responder al huracán.
Personal del Sistema Médico Nacional de Desastres del HHS, el Cuerpo Comisionado del Servicio de Salud Pública de EEUU y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades están preparados para proporcionar atención médica federal y apoyo de salud pública si es necesario.
Las autoridades de salud pública en Puerto Rico están utilizando los datos disponibles a través del programa emPOWER del HHS, una asociación entre ASPR y CMS, para apoyar la planificación de emergencias y las actividades de divulgación de salud pública de respuesta.
El programa proporciona información valiosa sobre el número de beneficiarios de Medicare que dependen de equipos médicos duraderos dependientes de la electricidad y ciertos servicios de atención médica, como diálisis, tanque de oxígeno o salud en el hogar, para ayudar a anticipar, planificar y responder a las necesidades de los ciudadanos en riesgo en áreas potencialmente impactadas.
Al declarar la emergencia de salud pública y autorizar las flexibilidades para los beneficiarios de los CMS, Becerra actuó dentro de su autoridad bajo la Ley de Servicios de Salud Pública y la Ley de Seguridad Social. Estas acciones y flexibilidades son retroactivas al 17 de septiembre de 2022.
