La sensibilidad poética del cantautor uruguayo Jorge Drexler se mostró durante su presentación el sábado en el Coca-Cola Music Hall como parte de su gira de conciertos “Tinta y Tiempo”.
Acostumbrado a darle voz a temas que tocan el alma, el intérprete regaló una velada íntima marcada por el romance y anécdotas que dejaron establecido el maravilloso viaje de vivir y celebrar las victorias como las derrotas.
Su carisma y su temple sereno sumaron a la conexión con el público, que disfrutó acompañarlo junto a su banda a cantar un repertorio diverso de cerca de 30 temas. “El Plan Maestro”, “Cinturón Blanco”, “Corazón Impar”, “Bendito Desconcierto” y “¡Oh, Algoritmo!”, de su álbum “Tinta y Tiempo”, fueron algunas de las que formaron parte del primer bloque de su presentación.
“¡Por fin, Puerto Rico! Me siento muy emocionado. Este concierto de hoy tenía que haber sucedido hace 958 días exactamente”, saludó emocionado el cantautor. “Es una locura no solo el tiempo que pasó, las cosas que pasaron entremedio, especialmente aquí, además de la pandemia, hubo huracanes, terremotos, líos de toda índole, pero yo antes de seguir quiero agradecerles de verdad a las personas que guardaron ese ticket por 900 casi mil días. ¡Qué maravilla! Lo tomo como un acto de amor. Muchas gracias Puerto Rico por este acto de amor para conmigo y para con mi banda”, añadió emocionado.
Uno de los momentos más emotivos del espectáculo fue cuando el artista rindió homenaje a Puerto Rico al interpretar el célebre tema “Lamento Borincano”, lo que provocó efusivos vítores del público.
El espectáculo permitió reafirmar, una vez más, la magnitud de Jorge Drexler como un ícono de excelencia musical y compositiva.
