Abre en Cayey Tapa’o Wine & Beers, una nueva alternativa gastronómica

La ciudad de Cayey es ampliamente reconocida como una meca gastronómica para todos los gustos, y sus ofrecimientros están en constante renovación. Recientemente abrió en el centro urbano el restaurante Tapa’o Wine & Beers, en la Calle José De Diego, al lado de la tienda Los Mahones.

“Es un establecimiento que abrió recientemente y se destaca por su mezcla entre un ambiente rústico, acogedor y familiar. Esta nueva oferta se une a los muchos establecimientos de todo tipo que abren en Cayey”, señaló el alcalde Rolando Ortiz Velázquez. Un rápido repaso por el menú nos muestra una variedad de tapas como chorizo al vino, alcapurrias y mini rellenos, hasta empanadillas de granos, queso crema, espinaca y chorizo.

La picadera en Tapa’o Wine & Beers es clase aparte, pues ofrecen varios tamaños con las delicias más solicitadas por la clientela, como la carne encebollada o ahumada, camarones, chorizo, tostones y alitas. Para los amantes al buen vino, la carta ofrece el disfrute tanto por copas como por botellas, con selecciones de Mirassou Cabernet o Merlot de California, y el Tempranillo Arrocal de España y Minuty Rosado de Francia. Se complementa la cart con los espumosos como Lamarca Prosecco de Italia y opciones de los viñedos de Argentina. En el renglón de las cervezas, hay tantas opciones como gustos.

El menú, tanto de almuerzo como de cena, está disponible en https://www.tapaocayey.com, donde hay para escoger desde pasta y hamburguesas, hasta quesadillas y tacos para disfrutar en el salón o al fresco.  El horario de Tapa’o Wine & Beers, es de domingo a jueves de 9:00 de la mañana a 9:00 de la noche, los viernes y sábados de 9:00 de la mañana a 11:00 de la noche.

Quienes mejores pueden opinar sobre el restaurante y su servicio, son los propios comensales, como Ángel Joyner Cruz, quien dejó su parecer en el portal: “Buen ambiente familiar y rica comida.” Gilbert Ibarra asegura que “es un buen lugar para tomarse un vinito tranquilo con amistades”. Para Santos Camacho, “se pasa chévere con una picadera, comida, cervezas y buena compañía.”