En una encuesta realizada a anfitriones en Airbnb basados en Puerto Rico, el 99%[1] señaló que comparte con los huéspedes que recibe, recomendaciones de restaurantes, cafés tiendas, boutiques, sitios de interés cultural y sitios naturales, esto genera un impacto económico positivo para toda la comunidad ya que, por día, los huéspedes aproximadamente gastan en dichos lugares alrededor de $300[2] dólares por persona.
Airbnb contribuye al desarrollo económico de Puerto Rico a través del turismo, y sobre todo, gracias a los anfitriones, ya que son ellos quienes ayudan al impulso de la economía de los negocios locales y esto a su vez contribuye a la democratización del turismo, en la que todos resultan beneficiados.
Cabe destacar que este impacto económico es el resultado de la calidez de los anfitriones en Airbnb, quienes son grandes embajadores de sus comunidades. De acuerdo con la encuesta[3]:
- Alrededor del 27% recomendó a sus huéspedes restaurantes o cafés
- Arriba del 20% recomendó sitios o actividades culturales
- Arriba del 24% sugirió actividades al aire libre
- Arriba del 14% recomendó lugares no tan conocidos entre los turistas
- Arriba del 25% apoyó a negocios locales con sus recomendaciones
Por su parte, a los viajeros les agrada conocer los barrios en los que se hospedan y aprecian recibir recomendaciones por parte de sus anfitriones. De hecho, en la misma encuesta encontramos que el 52% de los viajeros[4] que contestaron en Puerto Rico indicaron que no hubiesen conocido el barrio donde se hospedaron si no se hubieran alojado en un espacio compartido en Airbnb.
En la actualidad, más del 92% de los anfitriones[5] en Airbnb en Puerto Rico residen en la isla. Esto significa que son los locales los que abren sus espacios para recibir a los turistas, mientras que solo el 6% de los anfitriones viven en los Estados Unidos Continentales. Además, según una encuesta realizada por Airbnb[6], más del 26% de los anfitriones encuestados en Puerto Rico ofrecen espacios en la casa donde ellos mismos viven.
Además, las mujeres anfitrionas en Airbnb son clave para la reactivación del turismo: la comunidad de anfitriones en Airbnb siempre ha sido potenciada por mujeres y eso sigue siendo relevante hasta el día de hoy. Se estima que el 56% de los anfitriones en Airbnb se autoidentifican como mujeres. Y en Puerto Rico, el 49% de los anfitriones de Airbnb son mujeres[7]. De igual forma, en todo el mundo, las nuevas anfitrionas mujeres han tenido más de 1.1 mil millones de dólares en ingresos en conjunto en 2021, incluidos 7.4 millones de dólares que obtuvieron en conjunto las nuevas anfitrionas en Puerto Rico[8] durante el 2021.
Otro segmento que se beneficia de ofrecer sus espacios en Airbnb son los adultos mayores de 60 años que representan aproximadamente el 19% de los anfitriones en Puerto Rico[9], quienes hoy siguen siendo productivos mostrando lo hermoso que es Puerto Rico.
En cuanto a 2021, nueva data indica que los ingresos de los anfitriones típicos en Puerto Rico alcanzaron los 239 millones de dólares, un aumento del 132% en comparación con 2019[10]. Además, los nuevos anfitriones en Puerto Rico notaron un aumento en sus ingresos en 2021, ganando, en promedio, más de 6.000 dólares durante 2021, un 159% más que en 2019[11].
Por su lado, los viajeros que se hospedan en espacios compartidos en Airbnb generan tracción en la economía local ya que arriba del 53% de los gastos que realizan los viajeros, no se relacionan con el hospedaje sino que son invertidos en los barrios donde se hospedan.[12]
Además de todo, Airbnb también apoya con la generación de empleos locales. De acuerdo con hallazgos de la encuesta, el 80% encuestados en Puerto Rico coincidieron en que contrataron a personas para que les ayudaran con sus alojamientos en el ámbito de limpieza, manejo de finanzas y manejo de reservas.[13]
“No sólo los anfitriones obtienen beneficios económicos, sino también las comunidades y los negocios en donde se encuentran. Las sugerencias que los anfitriones dan a los huéspedes para ayudarlos a vivir como verdaderos locales y a sumergirse de lleno en la cultura del lugar, son vitales para impulsar las economías”, comentó Carlos Olivos, director de Comunicación de habla hispana en Latinoamérica en Airbnb.
