Para muchas personas, las mascotas son un miembro más de la familia, por lo que su fallecimiento puede resultar en un momento sumamente doloroso y triste. Existe evidencia, según varios estudios clínicos, sobre el impacto emocional, anímico y físico que puede provocar la ausencia o perdida de un animal, ya sea por razones de edad, un accidente o una enfermedad.
Según un estudio del Departamento de Ciencias Animales de la Universidad de Hawai, el 30% de los dueños sienten dolor por aproximadamente seis meses después de haber perdido a su mascota; mientras que para un 12%, la perdida de una mascota supone un suceso traumático en sus vidas. Ese dolor y/o sufrimiento se acrecienta, especialmente, cuando los dueños se han visto obligados a sacrificar a su mascota debido a alguna enfermedad terminal.
La tristeza y el dolor son respuestas normales y naturales a la muerte. Al igual que lo que sentimos ante la muerte de seres queridos y amigos, el dolor y la tristeza por los animales solo se puede aliviar con el paso del tiempo, pero es importante conocer que hay formas saludables de lidiar con esa perdida.
A continuación, presentamos estos consejos para ayudarte a que lleves de una forma más sana esta situación:
- No ignore sus emociones. Para superar el dolor debemos exteriorizar nuestras emociones. Hay que darse tiempo, llorar cuando sea necesario. Conviene no hacerle caso a los comentarios u opiniones de aquellas personas que no pueden comprender su dolor, quizás porque nunca han vivido con un animal ni han pasado por lo mismo que usted.
- Háblelo. Desahogarse con alguien de confianza alivia y ayuda a superar las pérdidas. Cuando se acepta el estado de tristeza y que hay que superar el duelo, el proceso será más fácil.
- Busque una forma para despedirte de su mascota. Algunas personas deciden incinerar a su mascota o enterrarla.
- Identifique amigos y familiares que hayan pasado por la pérdida de su mascota. A menudo, otra persona que también ha experimentado este tipo de pérdida puede comprender mejor lo que está pasando. También puede buscar y consultar con grupos, foros y redes sociales de asociaciones o refugios de animales.
- Ríndale un homenaje o cree un legado. Puede plantar un árbol en memoria de su mascota, enmarcar un cuadro con su foto o ilustración, e inclusive, organizar un álbum de fotos con los momentos felices que disfrutaron juntos.
- Si tiene otras mascotas, trate de mantener su rutina normal. Las otras mascotas en el hogar también pueden sentir la pérdida cuando muere un animal con el que convivían. Se recomienda mantener sus rutinas diarias, o incluso, aumentar el ejercicio y los tiempos de juego. Esto no solo beneficiará a las otras mascotas, sino también puede ayudar a elevar tu estado de ánimo.
- Si tiene niños, sea sincero y explíqueles lo que le ha ocurrido a la mascota. Las palabras que exprese son muy importantes. Frases como “se ha ido” pueden crear la falsa expectativa de que algún día volverá. Mostrar ante ellos nuestros sentimientos y dejar que ellos también expresen lo que sienten.
- Aumente su vitalidad con ejercicio. Las mascotas ayudan, en especial a muchos adultos mayores, a mantenerse activos, lo que puede estimular su sistema inmunológico y aumentar tu energía. Es importante mantener óptimos sus niveles de actividad física después de la pérdida de la mascota. Consulte a su médico antes de comenzar un programa de ejercicios.
Algunas personas se plantean la idea de tener otra mascota después de perder a una. Según los distintos procesos de duelo y circunstancias personales, se recomienda superar el duelo antes de intentar crear vínculos con un nuevo animal.
Para más información, puede llamar al Colegio de Médicos Veterinarios de Puerto Rico al 787-249-5304 o acceder www.facebook.com/CMVPR.