En medio de los retos que ha enfrentado la niñez puertorriqueña para superar el encierro durante la pandemia, muchos niños han encontrado espacio y tiempo para ver crecer destrezas desconocidas que les permiten canalizar ansiedades y otras emociones, a través de la escritura.
Ese es el caso de María Luisa ‘Malu’ Negrón Quiñones, quien con tan sólo 10 años de edad, ya es autora de su libro titulado ‘Índigo y los Gigantes’ y también, podemos hablar de Jean-Pierre Pérez Serrano, de la misma edad y autor del cuento ‘Stick Brad y las semillas de Gracia’; historias escritas por niños y dirigida a sus pares, para ayudarlos a empoderarse.
Malu y Jean-Pierre crearon sus cuentos durante un campamento de verano de redacción creativa, titulado Domina tus Emociones Creando.
El descubrimiento de los pequeños literatos se da gracias a la escritora infantil, Kathia Alsina; quien asegura que “fue a través de la escritura creativa que logramos conocer el talento de estos niños y fomentar la lectura, así como la reflexión individual y colectiva”.
Malu describe con emoción y algo de nerviosismo, cómo empezó el proceso de redacción. “Fui a casa de mi abuela y pregunté: ¿de qué puedo escribir mi cuento? y ella me dijo que lo hiciera sobre una mujer guerrera y la idea me gustó”, asegura la pequeña escritora local.
Estuvo varios días pensando y desarrollando el concepto, hasta lograr la historia ‘Índigo y los Gigantes’, que trata sobre una niña luchadora y tenaz que salva a su pueblo de unos enemigos que amenazan con robar unas frutas maravillosas. “Le puse el nombre de índigo, porque es uno de mis colores favoritos”, acotó la pequeña jovencita.
“Es importante y necesario despertar esa semilla en otros niños y niñas puertorriqueñas, a través de talleres de redacción creativa, diseñados para adelantar sus habilidades cognitivas”, dijo la escritora Kathia Alsina, quién estructuró un taller “con el objetivo de ayudar a crear el pie forzado para que los participantes puedan dar rienda suelta a su imaginación, libre de prejuicios y de preconcepciones de la realidad”.
La escritura creativa no es la única vía que utiliza la escritora para hacer florecer la capacidad de creación ideas; también integra reflexionar sobre las vivencias personales, la música, técnicas de relajación y ejercicios de creatividad artística.
Por ejemplo, Jean Pierre, escribió su cuento inspirado en sus dedos y logró crear el personaje de Stick Brad. Parte del drama se inspira en sus vivencias y trabaja temas de emprendimiento, autoestima, manifestación de tus sueños y manejo de emociones. El libro de Jean Pierre, contiene páginas para colorear, actividades creativas, sopa de letras y preguntas de comprensión de lectura.
Los próximos días, 2 y 3 de abril, la escritora Kathia Alsina, ofrecerá el taller presencial en el que los padres y sus hijos podrán escribir su cuento.
“Es un taller de 3.5 horas en el que cada familia podrá desarrollar una pequeña historia, un personaje principal. Para lograrlo se usan juegos y metodologías probadas”, dijo la también ilustradora.
