Lo que comenzó con sombreros Panamá cuidadosamente elaborados, hoy se expande hacia nuevas formas de expresión que conservan el alma artesanal que distingue a El Galpón. Con la incorporación de relojes de madera y gafas de sol artesanales, la marca reafirma su compromiso con el diseño responsable, la sostenibilidad y la autenticidad rumbo a cumplir 20 años en la industria.
En El Galpón, no se trata solo de vender accesorios. Se trata de crear piezas que transmitan una historia, que resuenen con autenticidad y presenten el trabajo meticuloso de artesanos de distintas partes del mundo. Cada sombrero, reloj o par de gafas de sol nace de un proceso colaborativo, donde el arte, la tradición y el diseño moderno se entrelazan con intención y propósito.
Ver a alguien apreciar la confección de un sombrero Panamá o detenerse a admirar la textura única de un reloj de madera es testimonio de la pasión y dedicación invertida en cada pieza. Es también un reflejo del legado que nació en las calles del Viejo San Juan y que continúa creciendo, impulsado por el orgullo de sus clientes.
Según explica Gustavo Lerner, quien es propietario de El Galpón junto a su esposa Betsy García la decisión de diseñar accesorios con madera surge de una evolución natural: un equilibrio entre las raíces artesanales de la marca y las nuevas preferencias de una clientela que busca productos con carácter, sostenibles y hechos con el alma. La creciente demanda por piezas auténticas llevó a El Galpón a explorar nuevos territorios, sin renunciar a su esencia.
Diseñados por Gustavo Lerner y Betsy García, los nuevos accesorios mantienen la filosofía de la marca: materiales nobles, manufactura artesanal y una estética atemporal. La madera utilizada proviene de fuentes responsables, seleccionada por su durabilidad, belleza natural y bajo impacto ambiental.
El proceso de confección es riguroso: desde la evaluación de la textura y el color, hasta la colaboración directa con artesanos que dominan las propiedades de cada tipo de madera. “Cada pieza se inspecciona cuidadosamente para asegurar que cumpla con los altos estándares de calidad que definen a El Galpón”, explicó Betsy.
Los relojes y gafas de madera de El Galpón no son simples accesorios, prometen ser piezas de conversación. Son extensiones de quienes los llevan. Son piezas que celebran la autenticidad, que comunican una forma de vida conectada con la naturaleza, la historia y el detalle. “Imaginamos a individuos con un fuerte sentido del estilo personal, que aprecian los detalles y buscan piezas que reflejen su identidad. Queremos que se sientan orgullosos de llevar algo irrepetible”, afirmó Gustavo Lerner.
Los valores que esta colección busca transmitir son autenticidad, calidad artesanal, sostenibilidad y singularidad. El objetivo es claro: que cada persona que use un accesorio de El Galpón se sienta única, especial y parte de una tradición que honra lo hecho con las manos y con el corazón. “Cada sombrero, cada reloj, cada par de gafas es una declaración silenciosa de individualidad. “Nuestros productos no siguen tendencias: cuentan historias. Son extensiones de quienes los eligen, añadió Lerner.
El Galpón continúa posicionándose como un referente de diseño consciente, manteniéndose fiel a sus raíces mientras proyecta su visión al mundo desde su taller en el Viejo San Juan hasta su plataforma global: www.elgalpon.co