El representante por el Distrito 23 José Rivera Madera, zona de los epicentros telúricos que afectaron miles de estructuras entre el 2019 y 2020, catalogó como, “inaudito despilfarro de dinero”, el gasto de sobre 50 millones de dólares en la colocación de instalaciones modulares en cuatro municipios del sur de la isla para ser utilizado como salones de clases.
Según entiende el legislador, con la cantidad invertida en algunos municipios se hubiesen podido reparar planteles afectados como la Josefa Vélez bauza en Peñuelas y la Herminio Arzola, en Guayanilla, por lo que no descarta encaminar una investigación cameral sobre el asunto.
“Catorce millones en Peñuelas, 20 en Yauco, 8 en Guayanilla y más de 12 en Guánica, era cantidad más que suficiente para realizar los arreglos necesarios en los planteles afectados, en lugar de haber sido sustituidos por módulos. Lo peor de la situación es que todos sabemos son instalaciones temporeras y de poca resistencia. Mal utilizaron el dinero para beneficiar unas compañías que inflaron sus precios. Se han lucrado del dinero de la recuperación, peor aún, se han lucrado de la necesidad de nuestros niños.” señaló el legislador.
Rivera Madera, recordó su advertencia lanzada desde principios de cuatrienio en el sentido de que el gobierno ha llevado un plan sistemático con la intención de continuar con el cierre de planteles de manera arbitraria, “y a espaldas de las comunidades”, sostuvo.
“Evidentemente las instrucciones y acciones de este gobierno de Pierluisi, continuación del anterior de Rosselló-Keleher, es el de cerrar planteles dejando las comunidades desprovistas de escuelas. Muestra de ello es que el gobernador veto el Proyecto de la Cámara número 17 que presentamos y el en cual solicitábamos que, antes de cerrar una sola escuela, se consultara a las comunidades. Pero aquí el PNP (Partido Nuevo Progresista) trabaja a base de sus caprichos y agendas, malgastando el dinero del pueblo y beneficiando a parientes, dolientes, primos y amigos de la casa”, sentenció Rivera Madera.
El proyecto a cuál aduce el legislador tenía como finalidad garantizar que el cierre de planteles escolares fuera precedido por una consulta a la comunidad y un exhaustivo estudio de necesidad y viabilidad, tomando en consideración las particularidades de cada región de la isla y las realidades socioeconómicas de la población a la cual le sirve. El mismo fue vetado por el gobernador Pierluisi en la pasada sesión legislativa.
“50 millones de dólares era dinero más que suficiente para arreglar las escuelas afectadas. A eso súmale que han pasado más de tres años de inacción, lo que nos levanta muchas interrogantes sobre el destino final de los planteles abandonados por este gobierno y si la inversión es una justificable, por lo que estamos contemplando solicitar una investigación. Nuestros niños han sufrido de la poca honestidad, insensibilidad y malos manejos en el Departamento de Educación en manos del PNP. Ahí está el récord, el pueblo los conoce, manifestó” Rivera Madera.