La visita a Puerto Rico de la secretaria de Vivienda y Desarrollo Urbano Federal (HUD), Marcia Fudge, “debe ser aprovechada para solicitar a la funcionaria federal que HUD y la Agencia Federal para el Manejo de Desastres (FEMA) consideren la asignación de un monitor federal para los fondos asignados a la recuperación en Guayanilla”, expresó el dirigente del Partido Popular Democrático (PPD) en este municipio, Nery Velázquez Dip, al insistir en alertar sobre constantes improvisaciones por parte de la administración del alcalde Raúl Rivera.
Velázquez Dip denunció como una de las primeras gestiones de Rivera la cancelación en enero de 2021 de las obras del Programa de Demoliciones que la administración del saliente alcalde Nelson Torres Yordan había iniciado con una asignación de 10 millones de dólares por parte del Departamento de Vivienda.
“Fue una rara movida para dar paso a una subasta que terminó siendo impugnada por uno de los licitadores, que por cierto fue el que presento mejores precios y cualificaciones y no fue favorecido por la junta de subasta, que según se alegó no operaban conforme a reglamento”, aseveró el líder del PPD en Guayanilla.
Tras 28 meses transcurridos desde los temblores y 14 meses desde el cambio de administración municipal, el alcalde Rivera ha dicho que en este pueblo se han demolido 25 residencias, cifra que ha sido refutada por fuentes cercanas al municipio, de las cuales ocho, según Velázquez Dip, corresponden a trabajos realizados por la anterior administración en los últimos dos meses de 2020.
El político guayanillense explicó que, si se toma como base comparativa los datos del vecino pueblo de Yauco, donde se ha demolido bajo el mismo programa y en el mismo lapso un centenar de residencias afectadas, “se demuestra una total incompetencia por parte de la administración actual manejando los programas de recuperación”.
Velázquez Dip había alertado hace algunos meses que, ante la falta de planes y el evidente desconocimiento administrativo de Rivera, el gobierno federal y estatal debían considerar asignar un monitor para establecer el orden de los trabajos y la administración de los fondos asignados por las agencias.
“Lo hemos dicho y lo repetimos, es cierto que el gobierno federal y el local tienen que ayudar y asignar los recursos, pero el desempeño de los municipios es clave y en Guayanilla ha sido uno cuestionable. Fueron más de 70 millones de dólares los obligados por FEMA como resultado de los daños provocados por el huracán María, 10 millones para demoliciones, otros 15 a 20 millones para diferentes programas y proyectos y hasta el momento han avanzado muy poco. Entiendo que se debe asignar un monitor federal para evitar improvisaciones y acciones que culminen en señalamientos, acusaciones y perdidas de fondos”, sostuvo Nery Velázquez.
